Ayer pensaba, con cierta melancolía, en lo rápido que pasa el tiempo.
A fines de 2021, hace apenas un poco más de dos años, un bitcoin se canjeaba por $64.000 USD. Hoy, después de caer casi 80%, y vivir esos años bajo el escrutinio de quienes en ese momento tampoco compraron, hemos vuelto a esos precios.
Felicitaciones.
Si seguiste aprendiendo, creyendo, acumulando, y holdeando, hoy toca disfrutar de estos precios y los que vienen. No fueron años fáciles.
Si seguiste negándote, rechazándolo, y hundiendo tu cabeza en la arena jurando que no existe otro modelo mental que el tuyo, también felicitaciones. Imagino que tampoco fueron años fáciles.
Y a los pobres diablos que aún no se atreven, desde la piscina les contamos que el agua está rica. Tírense.
Tres letras: ETF
Mientras el mundo dormía, nueve fondos de inversiones gringos encendieron una poderosa mecha por debajo de bitcoin.
BlackRock, (IBIT), Fidelity (FBTC), Bitwise (BITB), Ark Invest 21Shares (ARKB), Invesco (BTCO), VanEck (HODL), Valkyrie (BRRR), Franklin Templeton (EZBC), and WisdomTree (BTCW).
Un ETF es un instrumento financiero que replica el comportamiento de un activo. Sigue su precio, sin necesariamente exponer a un inversionista a comprar ese activo directamente.
En el caso de bitcoin, con el ETF, inviersionistas no están comprando el activo propiamente tal, sino una representación del activo, que sigue el precio de bitcoin.
Pero es el ETF lo que ha gatillado el alza violenta en el precio de bitcoin.
Para darles algunas cifras:
Desde su lanzamiento, el 11 de Enero, estos fondos han comprado 300.000 BTC. Eso equivale al 1,5% de la oferta total de bitcoin.
Ayer compraron $6,6 mil millones de dólares en bitcoin, duplicando lo que compraron el lunes, que ya fue récord, colocando a 4 de estos ETF en el top 20 del mundo.
El ETF más grande, BlackRock, tiene $8 mil millones en activos bajo gestión. Eso lo deja en el top 5% de todos los ETF–del mundo.
La explosión del ETF es real.
¿Qué viene ahora?
Bitcoin está empezando a devorarse el sistema financiero tradicional.
Los dólares que están entrando tienen que salir de algún lado. Esto significa que acciones, bonos, oro, y otros instrumentos van a desinflarse, como ya lo estamos viendo, e irán a parar a estos ETF.
Datos duros: en 2024, sólo tres ETF de oro han visto entrada de capital, y dos de los mayores fondos (BlackRock siendo uno de ellos) registraron salidas de fondos de $230 millones y $430 millones.
De hecho, hemos visto muchos días donde el volumen de compras por el ETF de Bitcoin es igual—o mayor—que el volumen de ventas de los ETF de oro. Hoy, a menos de dos meses de existencia del ETF de Bitcoin, estos alcanzan ya un 50% de los ETF de oro.
Durante 15 años, Bitcoin demostró sus méritos, pero sólo estuvo disponible para quienes se atrevían.
Y digo atrevían porque creo que navegar un exchange sigue siendo difícil, las llaves privadas una especie de arameo moderno, y anotar correctamente 12-24 palabras es una misión–para el común de las personas.
La mayoría de las personas quiere algo estéril, sencillo, y rápido.
Los ETF son eso. Un click y te expones. El mercado acaba de explotar, y estamos frente a un punto de inflección. Agregamos el halving, que viene a pasos tormentosos, y no queda otra que afirmarse.
No predigo precios, pero si predigo un camino: arriba y a la derecha.